Carme Ruscalleda elabora un menú antienvejecimiento

Redacción

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Reproducimos el artículo publicado por Belén Parra en «El Mundo».

Carme Ruscalleda elabora un menú antienvejecimiento 0
Carme Ruscalleda, del hotel Mandarín Oriental, y Manuel Sánchez, de la Clínica Planas

No hay productos milagrosos pero sí actitudes infalibles para luchar contra el envejecimiento. Basta tan sólo un pelín de disciplina y mucha constancia para que todo cuanto nos llevemos a la boca repercuta en nuestro bienestar y en nuestra longevidad.

Con el objetivo de retrasar los signos del paso del tiempo a partir de unos buenos hábitos alimenticios es como la Clínica Planas de Barcelona y el hotel Mandarin Oriental de la misma ciudad se propusieron hace ocho meses dotar al restaurante Moments, de una estrella Michelin, de un menú de platos con productos de la dieta mediterránea que incrementaran los antioxidantes y las vitaminas del organismo y redujeran las grasas saturadas sin necesidad de pasar hambre. Así nació la fórmula del menú ‘antiaging’, que por ahora sólo ofrece el establecimiento de Carme Ruscalleda (gestionado en el día a día por su hijo Raül Balam) en toda España.

La intención del doctor Manuel Sánchez es que tanto los pacientes que se sometan a un tratamiento ‘antiaging’ como aquellos que quieran empezar a cuidarse o a poner remedio a ciertos síntomas físicos de la edad sepan encontrar la solución a sus inquietudes y dolencias en la alimentación.

«Es una filosofía de aprendizaje a partir de pequeñas cosas», advierte Sánchez. El médico se refiere a sustituir la mantequilla por aceite, cocinar productos de temporada y de un entorno próximo, consumir un tipo de carnes (de potro, por ejemplo) por otras en virtud de su índice de aceites grasos omega3 y cuidar mucho cada proceso de elaboración. «Quizás no vamos a vivir más pero si aprendemos a corregir pequeños errores y vicios nos podremos sentir mejor».

Durante ocho meses, el doctor ha estado guiando a Ruscalleda sobre qué alimentos administrar según sus propiedades, su origen, sus virtudes, así como de qué forma cocinarlos para aprovechar mejor sus nutrientes y en qué dosis servirlos en el plato. «Como en cualquier dieta, no hay que imponer prohibiciones. Se puede comer de todo con la única restricción de la cantidad», asevera Sánchez. Ruscalleda ha logrado, bajo la periódica supervisión médica, platos que no sólo entran por los ojos sino que son sabrosos, sacian el apetito y retrasan los signos de envejecimiento.

De las advertencias médicas tampoco se libran las bebidas. El vino tinto es entre los caldos, el más beneficioso para la salud cardiovascular, si bien a las mujeres, su consumo sólo está indicado con moderación y en cantidades inferiores a las que pueden tomar los hombres. Absolutamente recomendable «para la regeneración del ADN» es el té verde y prescindible debería ser el café al final de las comidas.

Las recomendaciones se explican y se siguen a rajatabla en el Moments, donde al final de un listado de cinco platos (aperitivo, primero, plato principal, postre y «divertimentos de pastelería») se añade en la pauta un pequeño resumen con los nutrientes, las grasas saturadas y las técnicas de elaboración desarrolladas en la cocina del restaurante para cada tipo de menú.

La oferta ‘antiaging’ sólo está disponible los mediodías de lunes a viernes por 59 euros (bebidas aparte) en el restaurante ‘estrellado’ del Mandarin Oriental de Barcelona.

El de estos días se compone de un Martini con texturas; langostinos con alcachofas en tres texturas; filete de potro con calçots, brócoli, escarola y salsa; crema de limón con naranjas y aguacate y chocolate 70% junto con regaliz. Está previsto que cambie la próxima semana.