La 52 edición de los Premios Gastronómicos de la Asociación de Cocineros y Reposteros de Madrid (ACYRE Madrid) tiene un denominador común, el que domina en el sector capitalino: «Una gastronomía que no olvida sus raíces, pero que no tiene miedo de soñar”, destacaba su presidente, Eduardo Casquero, en la gala de entrega celebrada en la Real Casa de Correos.

Como mejor restaurante la Junta Directiva de Acyre reconoce Osa, el proyecto vital que Jorge Muñoz y Sara Peral inauguraron en 2023 y se ha convertido por derecho propio y una cocina valiente, distinta y un punto salvaje en una referencia del sector. Óscar Velasco se lleva, por sobrados méritos, el de mejor cocinero, que revalida día a día junto con su mujer, la repostera y jefa de sala Montse Abellá, en VelascoAbellá, donde imperan los sabores elegantes a partir de los mejores productos de temporada.

“No tengo palabras para agradecer lo que significa para mí este premio por venir de la profesión, de mis compañeros y colegas», señalaba el cocinero y copropietario, quien dedicó el galardón al equipo, a su pareja y a sus clientes «que son los que nos permiten abrir hoy y volver a abrir mañana».

Estela Gutiérrez y su golosa y técnicamente perfecta propuesta en Estela Hojaldre se lleva el reconocimiento como mejor pastelera, lo que la incentiva a «seguir innovando y aprendiendo a diario» de un oficio que remite a la infancia y constituye su modo de vida y su pasión.

Muy emotiva fue la entrega del premio Acyre Madrid a la labor social a través de la gastronomía a Pepa Muñoz (Qüenco de Pepa), activista de organizaciones como World Central Kitchen. “Lo único que hago es devolver lo que me enseñaron mis padres. Que te den un premio por entregarte a los demás es doblemente bonito y emocionante, dijo quien subrayó el trabajo de los voluntarios en situaciones de emergencia, especialmente a los que arrimaron el hombro en una Valencia desolada por la DANA.

Como mejor jefe de sala/sumiller fue nombrado Óscar Marcos (Alabaster), el premio honorífico a toda una vida como referente en la gastronomía de Madrid se lo llevó Casa Botín, el restaurante más antiguo del mundo; Macarena Escrivá recogió el galardón a mejor periodista gastronómica, Lalopez (Mercado Antón Martín) el de mejor puesto gastronómico de mercado, Grupo Arzábal el de labor empresarial y Bombas, Lagartos y Cohetes de Vallekas el de producto madrileño por sus afamadas banderillas y gildas.
Durante la ceremonia de entrega subieron los escenarios los últimos presidentes y vicepresidenta de ACYRE Madrid, Eduardo Casquero, Miriam Hernández y Begoña Gardel, respectivamente, para otorgar un reconocimiento especial al compromiso con la entidad a José Luis Inarejos, vicepresidente actual de la Asociación y expresidente durante dos mandatos, por su «dedicación en cuerpo y alma».
Estos premios, destacó Eduardo Casquero, quieren reconocer y agradecer la labor de los profesionales del sector que hacen que «nuestra gastronomía brille dentro y fuera de nuestras fronteras” con «diferentes estilos, trayectorias y propuestas que tienen algo en común: la entrega absoluta a su vocación».