Guía Repsol elige los mejores rincones para saborear el verano

Guía Repsol te descubre más de 260 chiringuitos y terrazas para exprimir las vacaciones. Los Soletes de esta edición miran hacia el mar desde enclaves diversos, prometen cócteles en frondosos jardines y desayunos a la sombra en una plaza tranquila.

7Caníbales

|

Tomates que saben a sol, brasas encendidas y copas que tintinean frente al mar. Con la llegada del buen tiempo, Guía Repsol estrena una nueva edición de sus Soletes estivales: más de 260 bares, terrazas, chiringuitos y rincones escondidos donde comer bien y estar mejor. Lugares donde el reloj se desacelera, el verano se disfruta a bocados y la brisa sabe a vacaciones.

 

La selección —la duodécima desde el lanzamiento de esta calificación— propone descubrir o redescubrir aquellos sitios que los locales recomiendan con convicción, aunque a veces les cueste revelarlos. Terrazas a la sombra de un pinar, patios secretos en pleno casco urbano o chiringuitos que rozan la orilla: todo vale si se come rico y el ambiente invita a quedarse.

Guía Repsol elige los mejores rincones para saborear el verano 0
Restaurante El Sombrerico – Murcia

“Los Soletes se han convertido en un top del verano, porque te evitan tener que buscar dónde ir y te desvelan lugares que no tenías en el radar, con la garantía de estar seleccionados por un equipo de expertos con un criterio gastro que coincide con el de la mayoría”, explica María Ritter, directora de Guía Repsol.

La propuesta de este verano mira —literalmente— hacia el horizonte. En enclaves tan dispares como la agreste playa del Hoyo en Águilas (Murcia), el mítico Bartolo de San Fernando (Cádiz), o el mirador natural de Cabo Busto en Luarca (Asturias), la experiencia gastronómica se funde con el paisaje. Y más allá de la costa, hay sorpresas en el interior: bordas pirenaicas en Huesca, jardines escondidos en la Sierra de Santa Cruz (Cáceres) o kioscos junto a lagunas protegidas en Badajoz.

Con cerca de 5.000 establecimientos ya distinguidos desde el lanzamiento de esta iniciativa, los Soletes se consolidan como la guía informal y útil para el verano: propuestas honestas, apetecibles y con alma. Porque en vacaciones, pocas cosas hay tan placenteras como encontrar ese sitio donde apetece quedarse un rato más, pedir una ronda extra y brindar con quien tienes al lado.