Valencia se mueve

Pau Albornà

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Ricard Camarena trasladará Arrop y Vicente Patiño deja Óleo

Si hace unos días nos enterábamos de que Vicente Patiño finalizaba su relación profesional con el restaurante Óleo, hoy hemos podido saber oficialmente que Ricard Camarena dejará el actual restaurante ubicado en el Hotel Palacio Marqués de Caro para trasladar Arrop a un nuevo emplazamiento. Dos casos parecidos y con Valencia como protagonista, que demuestran que algo está pasando en una comunidad con cocineros inquietos, que arriesgan y para nada conformistas.

Que el Levante tiene mucho que decir en la gastronomía española es un hecho que ha quedado demostrado desde hace tiempo, con muchos restaurantes a un nivel espectacular y cada vez más prestigio nacional e internacional. Quieren competir de tú a tú con Catalunya y Euskadi, las dos grandes potencias gastronómicas del país, y bajo el liderazgo de Quique Dacosta, va creciendo la nómina de cocineros de cartel: Ricard Camarena, Vicente Patiño, Paco Morales, Jordi Garrido, Raúl Aleixandre, Susi Díaz, Bernd Knöller, Dani Frías…

Un nuevo Arrop en dos o tres meses

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Ricard Camarena

Ricard Camarena abrió en 2004 el restaurante Arrop en Gandia, donde consiguió diversos premios y mucha proyección. En 2009 decide dar el salto a la capital, Valencia, con un nuevo restaurante a la altura de su cocina, el lujoso Hotel Palacio Marqués de Caro, ubicado en centro histórico de la ciudad y manteniendo el nombre de Arrop.

Y ha sido a principios de 2012, en el momento más importante de su carrera profesional, cuando un comprometido Ricard Camarena ha decidido poner fin a su vinculación con el hotel para empezar un proyecto más personal e independiente. Las causas han sido varias: las ataduras con un socio capitalista quizás reduzcan el riesgo en cuanto a inversión pero también coartan la libertad del cocinero, hecho que llevó a Ricard a plantear la posibilidad de alquilar el espacio que ocupaba el restaurante pero que el hotel declinó.

Sin embargo, la razón principal de la marcha de Arrop y su equipo a un nuevo destino no ha sido económica –llenaban prácticamente todos los servicios–, sino más bien filosófica. “Necesitábamos reencontrarnos con un proyecto más personal, alejado de una exagerada sofisticación y más cercano al cliente, más reducido y para unos 18 o 20 comensales, donde como profesional pueda cocinar cada día, aportar muchas más cosas y el factor humano prevalga”, según ha manifestado el propio Ricard a 7caníbales, que también admite la posibilidad de combinar el espacio gastronómico con otro más al estilo bistrot.

Y es que Arrop no cierra, solo termina una etapa para ser más auténtico. El nuevo restaurante también estará ubicado en Valencia y está previsto que abra en un plazo de entre dos y tres meses. “Queremos que la gente tenga la sensación de estar en su propia casa; que cliente, camareros y cocineros seamos uno solo, por ello intentaremos que la cocina esté integrada dentro de la sala”. De esta forma se sincera Ricard, un cocinero en constante crecimiento que ha preferido renunciar al lujo para ser más libre.

Vicente Patiño deja Óleo para empezar un nuevo proyecto

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Ricard Camarena / Chefsbook

Óleo y Vicente Patiño, cocinero que lo convirtió en uno de los restaurantes de moda de Valencia, finalizaron el 1 de febrero su relación profesional. Después de coleccionar premios y reconocimientos, el cocinero de Xàtiva decidió poner fin a su etapa como jefe de cocina de Óleo a causa de las seguidas diferencias con los propietarios.

A pesar de ello, Vicente Patiño se muestra “emocionado” después de las múltiples señales de apoyo y afecto que ha recibido durante esta semana. En la nota de prensa oficial donde anunciaba su marcha, aprovechó para “dar las gracias a clientes, proveedores y amigos por el apoyo demostrado durante estos casi 4 años y, en especial, durante esta última etapa del restaurante que ha estado marcada en algunos momentos por situaciones algo complejas”.

El futuro le aguarda, pero asegura que prepara “un nuevo proyecto profesional, mucho más personal, ambicioso y, sobre todo, con la ilusión de volver a haceros disfrutar de la buena mesa”.

Desde 7caníbales queremos reivindicar actitudes como las de Ricard Camarena y Vicente Patiño, valientes cocineros que anteponen el riesgo y la libertad a proyectos que no les llenan profesionalmente. Al fin y al cabo, la maldita crisis también puede convertirse en una oportunidad para renacer…

¡Suerte a los dos!