Estrenado el siglo XVIII, el cocinero de Napoleón Bonaparte conoció en la región de Turín un típico dulce piamontés llamado Zabaione. Éste se lo llevó en su recetario y de allí a la codificación de Escoffier, quien lo introdujo en Francia al gran público gastrónomo. Estamos hablando, evidentemente del sabayón. Este postre se basa en yemas de huevo, azúcar y alguna bebida licorosa.
Frutas rojas
Arándanos 1 bandeja
Frambuesas 1 bandeja
Moras 1 bandeja
Kiwi 2 u
Fresón 6u
Cortar las frutas de una manera vistosa y reservar en lugar húmedo y fresco hasta necesidad.
Sabayón
Nata 300 cl
Azúcar 125 g
Yema de huevo 100 g
Vino de Marsala 200 cl
Batir las yemas de los huevos al baño maría junto con el azúcar hasta doblar su volumen y blanquear. Añadir el vino entonces. Seguir batiendo fuera del calor hasta que enfriar la mezcla.
Helado de pan de especias
Azúcar 125 g
Canela molida 2 g
Clavo de olor 1 g
Harina 100 g
Huevo 3 u
Azúcar 150 g
Limón 125 g
Naranja 125 g
Anís estrellado 2 g
Nuez moscada 1 g
Yema de huevo 125 g
Agua 125 g
Curry 2 g
Mezclar para hacer un bizcocho tradicional pero con toda la variedad de especias y aromáticos. Cocer la mezcla de la manera común en un molde apto para el horno.
Una vez cocida y enfriada, deshacer hasta que quede hecho migajas.
Añadir a una crema inglesa hecha con el agua, la yema y el azúcar. Triturar todo bien hasta que quede homogéneo. Dejar reposar la mezcla durante 12h como mínimo. Pasar por la mantecadora y reservar hasta el momento del pase.
Finalización
En un plato hondo y bonito, colocar el sabayón que no esté muy frío y las frutas decorándolo de una manera armónica. Colocar una quenelle con el helado de pan de especias.