La Academia Internacional de Gastronomía ha concedido sus premios 2025, entre ellos el codiciado Chef de l’ Avenir (Chef del Futuro), destinado a aquellos jóvenes talentos que están comenzando una carrera que se intuye muy prometedora. Como fue el caso de ganadores de anteriores ediciones, como Begoña Rodrigo, Lucía Freitas, Maca de Castro, Dabiz Muñoz o Jordi Cruz. En esta ocasión recae en Ignacio «Coco» Montes, del restaurante Pabú (Madrid), que abrió a finales de 2023.
De raíces asturianas, este treintañero dejó una carrera en el sector informático para abrazar su pasión por la gastronomía. Trabajó en restaurantes de la talla del parisino L’Arpège, el neoyorquino Eleven Madison Park o el vizcaíno Azurmendi antes de abrir su propio espacio en la capital, donde luce una estrella Michelin y ofrece una cocina que define como de «microestaciones». Fresca, rigurosa con las temporadas y sin artificios innecesarios que se ha convertido en una de las más celebradas del panorama madrileño. Más que del futuro, Montes es la chef del inmediato presente.
El Premio al Repostero es para Fernando Sáenz (Logroño, 1971), bastante más que un simple heladero. Un creador que interpreta la naturaleza a través del frío y es capaz de alumbrar sabores inspirados en la sombra de una higuera, un paseo de verano o las racimas que cuelgan de un viñedo semidesnudo después de la vendimia. El obrador que gestiona junto a sus esposa y socia, Angelines González, es una referencia que abastece a algunos de los mejores chefs del panorama nacional y su heladería Della Sera, un centro de peregrinación para los golosos que visitan Logroño.
Fernando dio sus primeros pasos en el negocio familiar -La Taberna del Tío Jorge- donde sus postres ya despertaban el aplauso de la crítica. En 2002 fundó el obrador Grate con la vocación de innovar en el campo de la heladería a través de sabores que reflejaran el terruño riojano. A lo largo de su trayectoria se ha convertido en figura recurrente en congresos especializados como Madrid Fusión y en 2016 recibió el Premio Nacional de Gastronomía, al que ahora suma el de la institución que engloba a las 24 academias gastronómicas de todo el mundo. Este Prix au Chef Pâtissier le confirma como una de las referencias indiscutibles de la gastronomía dulce a nivel internacional.
Junto a Sáenz, la Academia ha reconocido a Montagud con el Grand Prix de la Culture Gastronomique por una trayectoria centenaria orientada a la gastronomía tanto con la revista Apicius como con la publicación de libros sobre figuras de referencia de la cocina española, al Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación CIAL por su labor científica con logros como la promoción del desarrollo tecnológico aplicado a mejorar el bienestar y la salud de la sociedad.
En el apartado de vinos, la Academia Internacional premia a la segoviana Silvia García, sumiller del hotel Mandarin Oriental Ritz de Madrid. Se formó en Madrid y Marbella, ha pasado por mesas como Kabuki o Mugaritz y en 2020 recibió la llamada de Quique Dacosta para dirigir la bodega del que estaba llamado a ser su gran desembarco en la capital. A día de hoy es una de las profesionales más respetadas del panorama nacional.
El palmarés se completa con el premio a la literatura gastronómica, que ha ido a parar a la obra «Porca Miseria», de Xesc Reina, un sabroso tratado sobre los oficios de la carne editado por Col&Col, y por el premio multimedia, que distingue la labor de Netflix en la producción y difusión de contenidos relacionados con la gastronomía.