Cenzontle 2019, un vino mexicano nuevo y completamente fuera del radar, producido en la región vitivinícola del Valle de Guadalupe, en Baja California, dejó a propios y extraños con la quijada de par en par. Había sido galardonado como mejor Vino Blanco Revelación Internacional en el Concurso Mundial de Bruselas. Fue en mayo de 2023 y la elección se produjo entre siete mil muestras provenientes de más de cincuenta países.
La bodega que lo produce se llama El Empecinado, en parte como muestra de admiración al libertario español y otro tanto debido al carácter pertinaz de Rubén Roa, su propietario.
“Durante una visita con mi padre al poblado de Roa, que se encuentra en la región de Ribera del Duero en España, vi la estatua de un hombre encadenado que usaba toda su fuerza para liberarse; era Juan Martín Díez, el héroe del pueblo. El Empecinado, como se le conoce popularmente, fue un militar que derrocó varias veces al ejército napoleónico y su historia me dejó muy impresionado”.
Roa se identificó con el tesón, audacia y rebeldía de aquel personaje y poco imaginaba, que aquel hombre originario de una de las regiones vitivinícolas más reconocidas a nivel mundial, serviría de inspiración para una bodega de vinos en el remoto Valle de Guadalupe, en la península de Baja California, y posteriormente para lograr un vino blanco reconocido como Revelación Internacional en el Concurso Mundial de Bruselas.
Todo empezó en una maestría
Si bien el nombre de su proyecto le fue desvelado en aquel viaje, su gusto por el vino inició años antes, en 1998, cuando fue a estudiar una maestría a España. “Me gustaba mucho que ahí la gente bebía vino a diario, no como en México donde es más bien una bebida que se considera quizás un poco elitista, para ocasiones especiales. Y así, probando diferentes uvas y diversas calidades, le fui agarrando el gusto y comencé a recorrer las regiones vitivinícolas de España, descubriendo un mundo apasionante que me atrapó por completo”, relata Roa.
“Los fracasos han marcado mi vida” dice con mucha seriedad Rubén, quien a pesar de estudiar un doctorado en economía en UCLA, donde fue invitado a quedarse como profesor visitante, ha emprendido negocios no tan exitosos, que lo convirtieron en un analista de riesgo que hoy asesora empresas de alto nivel.
En 2007, para darle más formalidad y encause a su afición, se metió a estudiar vinificación en la Estación de Oficios el Porvenir, mejor conocida como ‘la escuelita’ del enólogo Hugo D’Acosta. Lo que empezó como un pasatiempo, se volvería más serio en 2010, al comprar junto con su padre una propiedad en Valle de Guadalupe, con dos hectáreas de viñedos de más de cincuenta años que se encontraban en total abandono.
Palomino y chasselas
“Regenerar, podar, limpiar, recuperar y trasplantar, ha sido una tarea de años”, menciona Roa, “pero ha rendido frutos. Eventualmente metimos sistemas de riego y otro tipo de asistencia para nutrir y vigorizar el viñedo”. Además de la palomino, tienen chasselas certificada de Francia, por lo que -contra todos los vaticinios de aquellos detractores que aseguraban que Baja California es una región demasiado cálida y soleada para producir uvas blancas de calidad-, buscan especializarse en vinos blancos.
Jesús Rivera es el talento detrás de Cenzontle, el vino blanco del momento, así como de Corzo, Lince y Huitzili, las otras etiquetas que produce la bodega. Algo asombroso es que es el único enólogo que ha recibido dos veces el reconocimiento de Revelación Internacional en los treinta años del Concurso Mundial de Bruselas, primero en 2019 en Aigle, Suiza, con el tinto Caipirinha, de la bodega El Cielo, donde es el enólogo de cabecera desde hace más de una década, y ahora en la más reciente edición, llevada a cabo en Poreč, Croacia.
El nombre de Cezontle hace honor al ‘ave de las cuatrocientas voces’, nativa de la región, y de acuerdo con Rubén fue diseñado con cierta potencia y estructura, que le permiten maridarse de forma muy armoniosa con la cocina mexicana. Lo probé con unas enchiladas suizas y me supo a gloria.
“Ese año 2019, nos dio una uva excepcional y como aún estábamos con la bodega en construcción, por mi amistad de muchos años con Jesús Rivera, decidimos vinificarla en El Cielo, con el apoyo de Gustavo Ortega y Gina Estrada, quienes nos abrieron las puertas de la bodega y pusieron toda la tecnología y el equipo a nuestra disposición”.
Voluptuoso y equilibrado
Cenzontle 2019, el vino primogénito de El Empecinado, es un ensamble de sauvignon blanc, chardonnay y palomino, que se comporta voluptuoso desde la vista. Su color ambarino con destellos dorados se adhiere a la copa, gracias a la densidad que le procura el breve paso por barrica francesa, que también le confiere delicadas notas ahumadas. Aún así, permanece vibrante, fresco, con una nariz plena en frutas tropicales como piña y guayaba. También resaltan la manzana verde, los frutos secos, las flores y un recuerdo de mantequilla y panal de abeja. El equilibrio que se logra entre el alcohol y la acidez lo vuelve un vino muy agraciado, persistente y de paladar placentero, pero no por ello menos complejo y sofisticado.
Las demás etiquetas de la bodega aún no adquieren tanta notoriedad, pero están elaboradas con el mismo empeño y calidad que el vino galardonado. También rinden homenaje a los animales nativos de la Baja California: Huitzili 2022, el colibrí, es un blanco elaborado en su totalidad con uvas de palomino y chasselas del viñedo propio; Corso, que se refiere al venado, es un tempranillo y finalmente Lince, en honor al gato montés, es un cabernet sauvignon con merlot y nebbiolo.
“El reconocimiento es muy importante no solo para nosotros, también lo es para la región, que si bien es la más importante del país, aún tiene mucho que mostrar a nivel internacional, pues hacemos grandes vinos que seguro sorprenderán a más de uno y pondrán a México en el mapa de la vitivinicultura de calidad mundial. Y sobre lo que nos depara el futuro, que te digo, la bara quedó muy alta para mi primer vino, pero como el Empecinado, me encantan los retos y la aventura. Qué más sigue… bring it on”, termina Roa.