Los vinos, bodegas y viñas 'prefiloxeras' de Toro

Visita al municipio zamorano, donde actualmente nacen referencias vinícolas muy atractivas

Hacía mucho tiempo que quería visitar Toro. Un frustrado viaje a Roma y Venecia me ha permitido cambiar los aires mediterráneos por otros de influencia atlántica y la verdad es que me alegro mucho. Toro es una magnifica población, situada sobre una meseta que domina un caudaloso recodo del rio Duero, que se levanta en torno a su magnífica Colegiata, sus calles llenas de historia, escenario de batallas y conspiraciones cortesanas que evocan un intenso pasado. Es de visión obligatoria, la Iglesia de Santa María la Mayor, la Colegiata. Uno puede recrearse con la visión del pórtico de su Majestad, obra gótica excelentemente restaurada, decorada con gran número de esculturas y relieves policromos que recrean la Coronación de la Virgen y el Juicio Final.

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Pórtico de la Colegiata en Toro.

Toro forma parte de una bella y desconocida región de Zamora, que uno no se puede perder, por su historia, su cultura,  su gastronomía y naturalmente por sus vinos, de cepas prefiloxeras, que se han convertido en uno de los más seductores de este país. Vinos frescos, finos, delicados a la vez que potentes, con mucha estructura y buena acidez todo ello con un grado alcohólico elevado.

Un poco de historia

A pesar de haber conseguido la fama internacional recientemente, la historia del Vino de Toro es antigua. Ya los primeros escritos del vino nos llevan a la época romana y en los siglos XII y XIII eran objeto preciado en el mercado. En el reinado de Alfonso IX era el único vino permitido foráneo en Sevilla. Acompañaron a Cristóbal Colón en su primer viaje a América y el nombre de una de sus carabelas La Pinta, proviene de una medida de capacidad que era utilizada en Toro, que aún hoy día se utiliza para referirse a un trago de vino.

Toro tuvo la suerte  de que en el siglo XIX, apenas fue afectada por la plaga de la filoxera que arrasó el viñedo en Europa, convirtiéndose así en una región exportadora, sobre todo a Francia. El vino de Toro destacaba por su graduación y corpulencia, lo que permitía su transporte a tierras lejanas, y el vino no sufría ninguna alteración. Ya en el  inicio de los años 80, el mercado pedía vinos más finos y elegantes que los de toda la vida que eran de alta graduación. El primer paso fue iniciar la vendimia a primeros de septiembre en vez  de en los primeros días de octubre que era lo tradicional, logrando de esta forma reducir el grado alcohólico en unos tres grados.

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Ovoide de madera en Teso La Monja.

Manuel Fariña fue elegido el primer presidente de la D.O. TORO en 1987 y la persona que hizo posible cambiar el estilo de estos vinos. Esta D.O, comprende municipios de  las provincias de Zamora y Valladolid y en su inicio solo albergaba seis bodegas, hoy existen  más de cuarenta.

Teso La Monja

Sin duda, la bodega que más capta la atención de toda la zona. La huella enológica de Marcos Eguren reforzada por la visión empresarial de su hermano Miguel, ayudó  muchísimo a configurar  la D.O. TORO en una primera etapa, con su primera bodega Numantia- Termes. Producía entonces unas 100.000 botellas y eran propietarios de unas 40 Ha. de viñedo. Y además del Numantia producía el Termancia, un fabuloso vino que en 2004 obtuvo 100 puntos del prestigioso abogado y gurú del vino Robert Parker. Vendida  posteriormente al grupo Louis Vuitton-Moet Hennessy, el  fabricante de bienes de lujo más grande del mundo. Su venta por unos 30 millones de euros, causó sensación en el mundo vinícola.

Pero los Eguren lejos de retirarse de Toro han dado vida a una nueva bodega totalmente nueva situada sobre una colina en el término de Valldefingas a pocos kilómetros de Toro y allí nace Teso La Monja, de una pequeña parcela de 1,8 Ha de viñedo prefiloxero de tinta de Toro plantado en 1885!!! Cultivado según los principios de la biodinámica y cuya evolución en su vinificación por separado, convenció a Marcos Eguren para embotellar un vino de tan solo unas 900 botellas Teso La Monja, un vino que lo más novedoso está en el envase donde se realiza la fermentación maloláctica, un ovoide de roble francés, fabricado por Taransaud que genera un movimiento permanente del vino alrededor de las paredes del deposito y favorece la mezcla natural de las lías. Es posiblemente el vino más caro de este país. Unos 1.000€ más IVA la botella, es una  verdadera joya.

Otros grandes vinos que se elaboran en esta bodega son:

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Vinos de Teso La Monja.

ALMIREZ

Elaborado con 100% tinta de Toro de viñedos situados en Valdefingas, Toro, Peleagonzalo y El Palo. De 41,7 Ha. de viñedo. Envejecido durante 12 meses en barrica bordelesa de roble francés, 30% roble nuevo. Un vino que fruto del amplio conocimiento de la zona alcanza el máximo potencial de los vinos de Toro a través de una adecuada combinación de estas exclusivas cuatro zonas, logrando unir elegancia y potencia, frescura con frutosidad y equilibrio con expresividad.

VICTORINO

Con 100% Tinta de Toro Vitis Vinifera prefiloxérica sin injertar, de viñedos propios en Valdefingas, Toro y Villabuena del Puente de 45 a 100 años de antigüedad , envejecido durante 18 meses en barrica bordelesa nueva de roble francés.

Es el homenaje a los antepasados, hacia esta tierra y su uva, de exclusiva personalidad que conjuga bravura, armonía y equilibrio.

ALABASTER

Con 100% tinta de Toro, Vitis Vinifera prefiloxera, plantada en pie directo y autóctona, de los viñedos en Valmediano, La Jara y Marinacea, plantados en vaso con una edad media de más de 100 años. Envejecido en barricas nuevas de roble bordelés.

Como el alabastro, el más frágil de los envases destinado a guardar los perfumes, este vino es fino, elegante y delicado y con una potencia arrolladora.

Si tienen ocasión además de visitar la bodega, no se pierdan dar un paseo por el viñedo de Toro, pueden verlo al lado de la carretera , en los alrededores  de Valldefingas apreciaran y disfrutaran viendo sus viñas centenarias, todo un espectáculo si van a Teso La Monja. Vayan desde Toro, lo encontrarán enseguida.

Bodega Vega Sauco

Es una bodega familiar que data de 1986, aunque la familia lleva más de 35 años dedicándose a la viticultura y a la elaboración de vinos. Sin embargo es en 1991 cuando Wences que es el nombre por el que es conocido Wenceslao Gil Durantez, uno de los enólogos mas conocidos de este país. Trabajó para grandes bodegas en la Ribera del Duero, Cigales o Rueda y fue presidente de la Asociación de Enólogos de Castilla y León entre 1986 y 1996.

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Premio a Bodega Sauco.

Me explica que de Toro le enamoraron su terreno, su clima, sus personas pero sobre todo su variedad de uva “la tinta de Toro”. Es sin duda uno de los mejores conocedores de toda la DO y es un placer escucharlo hablar de los viñedos de la zona. Te explica de cada una su historia, sus propietarios, sus características y su comportamiento en la vinificación y envejecimiento. Fue el primer enólogo en la zona en elaborar crianzas y reservas, en 1991 puso en el mercado su primer maceración carbónica, produjo el primer tinto dulce natural de Toro, galardonado con varias medallas.

Otro hito muy importante para la bodega fue la designación a la mejor bodega revelación en los oscars del vino alemán de GIL LUNA. Su bodega creada para la elaboración de vinos de pago y vinos ecológicos fue galardonada en los premios New comer of de year en los premios Wine Awards que organiza la más prestigiosa revista alemana Wein Gourmet, la revista de vinos con mayor influencia en el centro y en el norte de Europa. Patricia Gil Luna, hija de Wenceslao, enóloga, gerente y export manager de la empresa, recibió el premio junto a grandes familias como TIganello y el recuerdo de este evento ocupa un lugar privilegiado en la sala donde catamos.

«No nos lo podíamos creer cuando nos seleccionaron para este premio» nos dice Patricia mientras catamos sus vinos uno tras otro durante tres cortas horas, acompañados de un excelente jamón y queso zamorano. Van pasando desde el Vega Sauco roble 2005 con tinta fina y garnacha 2005, al crianza también con tinta fina 95 % y garnacha , el Vega Sauco Adoremos 100 de tinta fina con 30 meses de paso en barrica  y especialmente me gustó  Wences 2004 un vino fermentado en madera y reposo 24 meses en barrica de roble francés. De su bodega ecológica Gil Luna hay que destacar el vino TRES LUNAS, también el vino “Sin Complejos”  la gran apuesta  personal de Patricia, un tinto joven. “Será un exitazo estoy segura», nos dice con toda la ilusión. Y especialmente su última novedad Doña Manuela 2012, prototipo de vino fino, elegante con finas notas de fruta que te envuelven la boca y tan goloso  al paso de boca que al  beberlo siempre te pide más.

No debo olvidarme de su vino más espectacular, un espumoso tinto, ligero, amable con notas de trufa que causa admiración. No había visto nunca un espumoso como este y es que aquí ves el mundo diferente con paz, sosiego, tranquilidad. Me ha encantado saborear un vino dulce o  espumoso de  uva Tinta de TORO.

Bodegas Liba&Deleite

La empresa Cepas y Bodegas arrancó en 1992 de la mano de  la sumiller Maite Geijo, una apasionada del mundo del vino nacida en Tudela del Duero. La primera bodega del grupo se situó en la localidad de La Horra para los vinos de Ribera del Duero. Liba&Deleite, la segunda bodega, está situada en Morales de Toro y junto a la bodega se erige el hotel Duermevela con solo siete habitaciones, destinado a los importadores extranjeros y personas vinculadas al mundo del vino.

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Cepas prefiloxeras en la DO Toro.

Cepas y Bodegas es la primera bodega elaboradora y fundada por sumilleres. El proceso de elaboración consiste en hacer un vino al gusto del consumidor. Maite Geijo, alma máter del proyecto, socia fundadora de las bodegas, obtuvo el título de Sumiller de la Cámara de Comercio de Valladolid y durante 10 años ejerció esta profesión.

Crea la marca ACONTIA tanto para sus vinos de la Ribera como en Toro. Apuesta por el roble español como el ideal para sus vinos y considera que con este tipo de roble los vinos respetan más la fruta y sus aromas. Elabora en Toro el primer verdejo, presentado en botella magnum, un vino blanco criado sobre lías de 13,5%. De color amarillo pálido verdoso, aromas de piña y cítricos, es un vino sabroso, exótico y muy frutal.

Como tinto, elabora ACONTIA’12 D.O TORO, un vino elaborado con Tinta de Toro 85% y Garnacha 15%. Un vino envejecido en barricas de roble español, tiene unos finos aromas de arándanos, cerveza y torrefactos. Es fresco, con buena estructura y con sutiles notas de fina madera.

La presentación de este vino en sociedad no pudo ser más espectacular. Fran Rivera Ordoñez adquirió en 2011 el 25% de la sociedad Liba&Deleite, y fue el momento en que Maite Geijo y su marido Roberto Martinez  aprovecharon el evento para lanzar la nueva imagen de Acontia D.O. TORO. que luce una etiqueta en la que destaca una cepa en forma de astas de toro.

Fue el único vino servido durante el enlace civil de Fran Rivera con Lourdes Montes, celebrado en la finca El Recreo de San Cayetano, en Ronda donde nació el diestro Antonio Ordoñez, abuelo de los hermanos Fran y Cayetano Rivera Ordoñez y ligada al mundo del cine ya que en ella reposan las cenizas desde 1985, del gran Orson Welles.

Una mejor presentación imposible, para ACONTIA: Un vino de Toro, propiedad de un torero y en una de las más hermosas fincas taurinas.