Pablo Castellet y Raúl Navarro, ambos con trayectoria en el mundo de la publicidad, decidieron diversificar su área de negocio y encontraron un nicho de mercado en los pollos a l’ast ecológicos. La tendencia verde, instaurada con éxito en el resto de Europa, marcha con prudente velocidad en nuestro país pero tiene todos los números de desvestirse de su etiqueta de ‘moda pasajera’, para acabar formando parte de la oferta habitual del mercado. Cuando eso ocurra, Pablo y Raúl estarán instalados en primera fila del palco de este escenario y gozarán de los privilegios de un vip.
Aficionados a la buena mesa, Pablo y Raúl se planteaban como convertir esta afición en otra pata de negocio que fuera accesible a todo el mundo, resultara útil y estuviera exenta de una complejidad con la que no pudieran lidiar. Tras dar muchas vueltas, decidieron que un local enfocado al take away con buen producto ecológico, preparaciones caseras y precios coherentes era lo idóneo. A partir de aquí, búsqueda de local, licencias, reformas y sobre todo, encontrar los proveedores que se desmarcaran de lo habitual por su calidad.
Los cocineros Javi Gavaldà y Valentina Sánchez se sumaron a los fogones del proyecto. Y en breve tuvieron que echar mano de un tercero para poder atender los pedidos.
Finalmente, el bautizo: Quin Pollastre! es el nombre del local que ellos definen como «la primera rostisseria ecológica de Catalunya». La expresión, traducida al castellano como «¡vaya pollo!», es toda una declaración de intenciones puesto que se pretende que el bocado sea tan sabroso que la idea emerja espontáneamente tras su degustación.
¿Qué pedir?
Parece evidente que pollo, pero existen dos posibilidades. El ecológico, con certificado de la CCPAE, a un precio de 20 €/kg (aproximadamente pesan algo más de dos kilos) y para los que no quieren gastarse tanto pero buscan un buen producto, el Gourmet de Alta Calidad, a 16 euros el entero y 9,95 el medio. Ambos están criados en Catalunya.
El ecológico, tal y como manda la legislación, ha sido alimentado con productos 100% orgánicos naturales, no se sacrifica antes de sus 81 días de vida, están libres de transgénicos y dioxinas y ha vivido en un espacio mínimo de tres metros cuadrado de patio.
El Gourmet de Alta Calidad ha sido alimentado con productos 100% vegetales naturales, no se sacrifica antes de sus 56 días de vida, no cuenta con harinas ni grasas animales y su espacio de crianza es mucho mejor que el de los pollos convencionales. Suele pesar un kg y medio.
En ambos casos, el animal ha sido cuidado para que su carne sea sabrosa, jugosa y de calidad.
Además de pollo, el local ofrece croquetas (de pollo, of course, pero también de jamón), albóndigas a la jardinera, quiche de verduras, lasaña de verduras, bacalao, ensalada de quinoa, ensaladilla rusa, escalibada, macarrones, empanadillas y canelones, entre otros. ¿Precio? Desde dos euros hasta seis.
Pablo y Raúl explican que todos los productos son ecológicos «hasta los de limpieza», añade Pablo. Además, los envases para llevar son compostables. Así la idea cumple el 360º y el discurso es completo.
Se ofrecen bebidas también ecológicas como vinos y cervezas, tanto para llevar como para consumirlas en el local.
El futuro
Aunque la idea inicial era un take away, disponen de alguna mesa para tomar los platos in situ. La intención es añadir más mesas en un futuro inmediato. Y ¿si hablamos de posibles franquicias? «No es la idea porque queremos controlar el negocio nosotros, no queremos que la idea que buscamos transmitir se desvirtúe», añade Raúl.
¿Dónde está? Pasaje Josep Llovera, 1. Barcelona.
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