Los galos logran su séptima victoria en 14 ediciones, por delante de Dinamarca y Japón
Francia se ha proclamado vencedor del Bocuse d’Or 2013, uno de los principales campeonatos culinarios del mundo, que se ha celebrado esta semana en el salón internacional de la restauración Sirha de Lyon. El equipo francés, encabezado por el chef Thibaut Ruggeri (Maison Lenotre de París), ha logrado su séptima corona en este concurso que se celebra cada dos años desde 1987. Dinamarca y Japón han completado el podio. En la última edición, el danés Rasmus Kofoed (restaurante Geranium) se llevó la victoria.
Fue Paul Bocuse, creador del concurso y padre de la Nouvelle cuisine, quien entregó el premio a los vencedores, que como el resto de participantes tuvieron 5 horas y 35 minutos para elaborar dos platos principales: uno de carne, con solomillo de ternera irlandesa y uno de pescado, con rodaballo y bogavante azul.
La presión que soportan los participantes es máxima, como lo demuestran dos escenas de esta edición: el ayudante de chef japonés Masanori Sakashita llorando de forma desconsolada al serle entregado el premio por el tercer puesto y el susto que protagonizó el preparador estonio Ragnar Omarsson, que se desplomó al inicio de la final con un ataque de epilepsia sin que la cosa llegara a mayores.
La final de esta competición, con 24 países participantes, no ha contado con ningún representante español, ya que el chef valenciano Evarist Miralles no logró la plaza, pese a reclamar que en su semifinal europea el horno y el fogón no funcionaron correctamente.