El sector reclama al Gobierno la revisión de algunas medidas para la reapertura de sus negocios 

Mónica Ramírez

|

Tanto Hostelería de España como AECOC y FIAB demandan al Gobierno seguir el ejemplo de otros países europeos y establecer la distancia de seguridad como parámetro para determinar el aforo de los establecimientos de cara a su reapertura. Además, piden ampliar hasta un 50% el aforo del interior de cada local y reclaman mayor atención al sector turístico. 

El sector reclama al Gobierno la revisión de algunas medidas para la reapertura de sus negocios  0

Las iniciativas aprobadas por el Gobierno para frenar las consecuencias tanto sanitarias como económicas de la situación generada por el Covid-19, han despertado, desde sus inicios, dudas y discrepancias en el sector de la hostelería. Y en su reapertura no ha sido diferente. 

En el caso de los ERTE, por ejemplo, fue una medida que se tomó “para que la empresa tuviese las máximas facilidades y así, por un lado, salvar la reducción drástica de ingresos y conseguir la subsistencia de la misma, y por otro que estos despidos fueran temporales y no definitivos”, especifica Pau Cortadas Guasch, profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Sin embargo, al final resultó más complicada de lo previsto tal y como indica Cortadas “la gestión de los ERTEs está siendo algo más difícil de lo que se anunció y además parece que no se calculó del todo bien el coste para el Estado y, por lo tanto, no se están permitiendo con la frecuencia que se debería”.  Y no solo esto, en su momento, el sector de la hostelería encontró ciertas dificultades en su tramitación y actualmente, se busca negociar el compromiso de mantener los puestos de trabajo seis meses después en los casos de ERTE por fuerza mayor.  

Los ICO, la famosa línea de préstamos facilitada por el Instituto de Crédito Oficial con unas condiciones especiales, también han generado cierta controversia. Al igual que en el caso anterior, la realidad se impone. “El coste es muy elevado y el nivel de deuda pública no permite mucho margen de actuación”, aclara el profesor.  

La complejidad de la situación ha dificultado la ejecución de ambas medidas. “Cuesta acceder a los ICO’s y los ERTE’s no se están pagando todos con la puntualidad pactada”, señala Cortadas. 

Con la reapertura escalonada de los establecimientos hosteleros surgen nuevas inquietudes.  Una de ellas, es la del aforo. Hostelería de España, AECOC y FIAB reclaman al Gobierno modificar las condiciones de apertura de la hostelería actualmente fijadas para las Fases 1 y 2 de la desescalada. “En la práctica totalidad de los países europeos, el criterio que determina las condiciones de apertura de los establecimientos hosteleros en sus fases de desescalada es la distancia mínima de seguridad, y es ésta, en consecuencia, la que fija el aforo máximo. Únicamente Portugal establece un porcentaje de aforo en su hostelería, que además es del 50%, tanto para espacios exteriores como interiores”, explican desde estas entidades. Además, consideran insuficiente el 40% de aforo previsto en la Fase 2, y solicitan, una ampliación hasta un mínimo del 50% el aforo en el interior de los locales de hostelería “siempre y cuando la distancia de seguridad pueda garantizarse”, especifican. 

Las tres entidades apuntan que esta propuesta –que aclaran que también ha solicitado el Gobierno Vasco- sería útil para “acelerar el proceso de recuperación económica y para recobrar parte de la actividad”. 

Para José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España, “la distancia de seguridad debe ser la que marque la vuelta a la actividad de los negocios hosteleros. Además, es importante incidir en que el uso obligatorio de la mascarilla introduce un elemento nuevo de seguridad, que deja en desuso las franjas horarias que no son aplicables en hostelería y comercios”. Un argumento que apoya José  Bonmatí, director general de AECOC, quien añade “las estrictas medidas contempladas en las guías elaboradas por el sector permiten una apertura segura de los establecimientos tanto para el personal como para los clientes”. Por su lado, Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB, insiste “es imprescindible activar el sector de la hostelería permitiendo ampliar el aforo de los locales con las máximas garantías sanitarias para trabajadores y público”. 

Como apoyo a sus argumentaciones exponen los ejemplos de otros países. “El resto de países europeos están marcando la distancia mínima de seguridad, atendiendo a los criterios de la OMS. Además, de establecerse el aforo como criterio, los límites marcados por el Gobierno son insuficientes”, apuntan. Con los parámetros establecidos por el Gobierno, las entidades señalan que durante las primeras semanas de apertura de negocios de hostelería en la Fase 1, tan solo el 15% de las terrazas que podían abrir, lo han hecho y “han registrado unas cifras de facturación muy bajas”. 

Al margen de este aspecto, las tres organizaciones afirman que también debería revisarse la propuesta del Gobierno de establecer una distancia de 2 metros. “La OMS establece una distancia mínima de seguridad de 1 metro para prevenir el contagio por la Covid-19″. Y añaden “1 metro o 1,5 metros de distancia de seguridad serían suficientes, atendiendo a las recomendaciones sanitarias”. 

Como en el anterior caso, en éste, también se invita al Gobierno a seguir el ejemplo de sus vecinos europeos. “Austria, Dinamarca, Francia, Italia o Suecia han fijado esa distancia mínima interpersonal de 1 metro recomendada por la OMS. En otros casos han preferido ampliarla hasta 1,5 metros, como Alemania, Grecia, Croacia o Bélgica”, especifican. 

Por su parte, Fedishoreca, organización que representa a las empresas de la distribución a la hostelería,  recoge la argumentación de las tres entidades anteriores y se suma a esta reivindicación. Reclama, a su vez, que el aforo permitido para los establecimientos de hostelería en la fase 2 sea como mínimo del 60% para «permitir aperturas sin pérdidas».  Para ellos, el aforo previsto en la fase 2 del 40% también es insuficiente, ya que, si se mantiene, se producirá -apuntan- un importante retraso en la reapertura y vuelta a la actividad de los trabajadores. Fedishoreca insiste “la distancia de seguridad y el uso de mascarillas, ahora obligatorias, garantizarían ya de forma suficiente la seguridad tanto de los trabajadores como de los clientes”.

En este sentido, esta organización, pide al Gobierno y a la Mesa de Diálogo Social que consideren la vinculación y dependencia total del sector de la distribución a Horeca de la actividad de la hostelería. «El sector de distribución a Horeca es clave en la cadena de valor de la hostelería y asegura el 80% de su abastecimiento, por ello, pedimos las mismas medidas que ya está reclamando el sector de la hostelería y el turismo», afirma Fedishoreca.

 

 

Y el turismo 

En cuanto al turismo, sector que incide en hostelería, declaran que “debe ser una prioridad nacional” ya que representa, según datos del INE, el 12,3% del PIB del país y da empleo a 2,7 millones de personas (el 13,5% del empleo total de la economía), cuyo 63% corresponde a empleados del sector de la hostelería. 

De acuerdo con los resultados de un estudio realizado por la consultora Foqus y la Universidad de Valencia “la hostelería podría perder alrededor de 900.000 empleos y hasta 67.000 millones de euros hasta final de año si no se recupera el turismo y se ponen en marcha planes de apoyo al sector en la línea de los aprobados en Francia o Italia, entre otros países de nuestro entorno”, señalan desde las asociaciones. 

En este aspecto, la comparación de España con el resto de países europeos no sale bien parada y se insiste “No entendemos que otros países europeos hayan tomado las medidas necesarias para paliar las graves consecuencias económicas que esta pandemia está acarreando al turismo, y que en España aún no se haya actuado en consecuencia”. 

A modo de ejemplo, se habla del caso de Francia e Italia. “En Francia se ha puesto en marcha el plan Marshall por el que se materializará en 18.000 millones de euros que destinará al rescate del sector, con 1.300 millones de inversión pública directa. En Italia se van a destinar bonos para gastar hasta final de año en hoteles y albergues del país (500 euros a familias con ingresos inferiores a 40.000 euros anuales, 300 euros para parejas sin hijos y 150 euros para quienes viajen solos), los bares y restaurantes podrán ocupar suelo público sin tener que pagar impuestos y se han destinado 2.000 millones de euros en ayudas a empresas del ámbito turístico para que adecúen sus estructuras a la situación de emergencia”, exponen. 

España es el segundo país en recepción de turistas, por detrás de Francia, con 83,7 millones de visitantes en 2019 y el segundo país con mayores ingresos por turismo, por detrás de EE.UU. 

Y mientras, se acaban de perfilar los detalles de la reapertura y el tránsito de una fase a otra, Pau Cortadas señala “La duración de la crisis sanitaria de la COVID19 tendrá una relación directa con la duración de la crisis económica posterior. Se ha estimado que cada mes supone medio año de recesión”. Pero no todo son malas noticias, en la comparación con la crisis del 2007 señala “estamos ahora ante una nueva crisis, pero con más capacidad de adaptar salarios y contratos”.  

Esperemos que los cifras de contagio hagan posible estar pronta recuperación. Veremos.