Calidad, compromiso y relato: claves para seducir los paladares suizos

Con menos de nueve millones de habitantes y una de las economías más prósperas del planeta, Suiza es un caramelo para cualquier empresa agroalimentaria con ambiciones en el mercado exterior.

“Es, por ejemplo, el país del mundo donde mejor se pagan los vinos españoles; a más del doble que en el mercado nacional”, explicaba María Naranjo, directora de Industria Alimentaria del ICEX, entidad que ha propiciado Spain Fusion Zurich con Alimentos de España y Vocento Gastronomía.

En el gran hotel Park Hyatt, diecisiete empresas -bodegas y productoras de aceites de oliva, ibéricos, fruta fresca, azafrán, trufas, algas o conservas vegetales, además de Raíz Culinaria de Castilla-La Mancha- han contado con el respaldo de siete estrellas Michelin, dos Masters of Wine y los mejores expertos españoles e internacionales en gastronomía para presentar sus productos.

Fran Martínez en su demostración sobre carne de caza

Suiza ofrece tanto como exige. Preocupado por la salud, la sostenibilidad y el compromiso social, el consumidor suizo demanda productos ecológicos, exquisitos en el contenido y en el continente y socialmente comprometidos.

Aquí, explicar el producto es tan importante como darlo a probar y España se siente capaz de convencer. En la selección de alimentos de Spain Fusion no han faltado ni los quesos artesanos. En un país quesero y abiertamente proteccionista con el producto nacional, podría parecer una osadía, pero Clara Díez, artífice de Formaje y embajadora de los quesos españoles en Zúrich, piensa que “lo más difícil es crear cultura de un producto, y Suiza tiene una cultura quesera que hace que los suizos sean capaces de apreciar un buen queso”.

En Spain Fusion, los quesos, todos distinguidos con importantes premios, llegaron acompañados por una selección de grandes vinos blancos presentada por el Master of Wine Fernando Mora.

Un producto que en Suiza es conocido y amado es el jamón ibérico. “Lo he llevado conmigo por todo el mundo”, decía el cocinero Ralph Schelling, que volvió a Suiza tras haber pasado por algunas de las cocinas más prestigiosas de España, incluyendo El Bulli, y que acudió a Spain Fusion para conocer novedades.

Le llamaron la atención las algas de la empresa gallega Porto Muiños, en especial la uva de mar.

También se confiesa gran enamorado de los productos ibéricos Hans Schneeberger, conocido periodista suizo que tras su jubilación se ha convertido en uno de los críticos de vinos más influyentes del país y que no quiso perderse Spain Fusion.

Schneeberger le concedió el sobresaliente a las cinco empresas de jamones y embutidos presentes en el evento, y en cuanto a la variada y ambiciosa selección de las bodegas participantes, con vinos ecológicos, zonas variadas (junto a bodegas de Rioja y Ribera del Duero, también presencia de Jumilla, Priorato, Aragón o Extremadura) y una imagen muy cuidada, el crítico reconoció que había probado “cosas muy interesantes”.

Pero advirtió de que las nuevas propuestas “llegan a un mercado maduro donde España se ha venido relacionando con Ribera del Duero, Rioja o Rueda, vinos de los que al consumidor medio le cuesta salir. Para los nuevos es importante seducir a pequeños distribuidores muy selectos y a la hostelería”.

La importancia del relato

Una buena historia ayuda a abrir muchas puertas. Es lo que ha comprobado la empresa de AOVEs y conservas vegetales Apadrina un Olivo, que ha dinamizado la economía de Oliete (Teruel) recuperando olivos abandonados en el éxodo rural.

Y la zaragozana Gardeniers, que elabora conservas vegetales, sopas y cremas empleando exclusivamente a personas con discapacidad intelectual.

O Las Truficas del Río Pilas, otra empresa familiar turolense que produce Tuber melanosporum y propone desde salsas y quesos trufados hasta chocolates con trufas, con una imagen joven, cuidada y cercana.

Lucía Freitas defendió las conservas españolas

Como señaló la cocinera gallega Lucía Freitas (A Tafona*) “el relato tiene fuerza si es verdad, y si es verdad, tiene toda la importancia del mundo para explicar dónde nacen y cómo se hacen los alimentos”.

Freitas se encargó de introducir las conservas de pescado y vegetales, uno de los tesoros de la despensa española que hay que explicar en países habituados a ver la conserva como un recurso barato y de escasa ambición gastronómica.

Fue parte de un equipo de embajadores de primera división donde estuvieron, junto a Alfonso Fernández, presentador habitual de Spain Fusion y catador internacional, el Master of Wine Andreas Kubach; Kerstin Barduhn, experta en AOVEs, y los cocineros Rocío Parra (En la Parra*), Fran Martínez (Maralba), Iván Cerdeño (Rte. Iván Cerdeño) y Luis Valls (El Poblet), todos ellos con 2 estrellas Michelin.

España ha llamado a la puerta del mercado suizo con toda su fuerza.